La crisis constitucional de Fiji de 2009 comenzó el viernes 10 de abril de 2009. El presidente de Fiji, Ratu Josefa Iloilo, anunció en una transmisión de radio nacional que derogaba la Constitución de Fiji. Despidió a todos los jueces y funcionarios constitucionales y asumió todo el gobierno del país después de que el Tribunal de Apelaciones dictaminara que el gobierno del primer ministro Frank Bainimarama era ilegal. Iloilo reinstaló a Bainimarama como primer ministro y a los miembros de su gabinete en sus cargos. También instituyó el estado de emergencia que aumentó los poderes policiales y permitió la censura de los medios.

El presidente de Fiji es el jefe de estado de la República de Fiji. El presidente es designado por el Parlamento por un período de tres años según los términos de la Constitución de Fiyi de 2013. Aunque no es del todo una figura decorativa, el papel del presidente en el gobierno es en gran parte ceremonial, pero existen importantes poderes de reserva que pueden ejercerse en caso de una crisis. Además, el presidente es el comandante en jefe de las Fuerzas Militares de la República de Fiji.