El presidente de la República Portuguesa (en portugués: Presidente da República Portuguesa, pronunciado [pɾɨziˈðẽtɨ ðɐ ʁɛˈpuβlikɐ puɾtuˈɣezɐ]) es el jefe de estado de Portugal.

Los poderes, funciones y deberes de los cargos presidenciales anteriores y su relación con el primer ministro y los gabinetes han diferido a lo largo del tiempo con las diversas constituciones portuguesas. Actualmente, en la Tercera República, un sistema semipresidencial, el presidente no tiene poder ejecutivo directo, sino que es más que una figura meramente ceremonial como suele ser el caso de los sistemas parlamentarios: una de sus responsabilidades más significativas es la promulgación de todas las leyes. promulgadas por las Cortes Generales o el Gobierno (acto sin el cual dichas leyes no tienen validez legal), con opción alternativa de vetarlas (aunque este veto puede ser superado en el caso de leyes aprobadas por las Cortes) o enviarlas al Tribunal Constitucional para su apreciación de si violan la Constitución. Esta y otras capacidades implican que el presidente de Portugal no encaja claramente en ninguno de los tres poderes tradicionales -legislativo, ejecutivo y judicial-, sino que actúa como una especie de "poder moderador" entre los tres tradicionales. El actual presidente de Portugal es Marcelo Rebelo de Sousa, quien asumió el cargo el 9 de marzo de 2016.