La masacre de Dunblane tuvo lugar en la escuela primaria de Dunblane cerca de Stirling, Escocia, Reino Unido, el 13 de marzo de 1996, cuando Thomas Hamilton mató a tiros a dieciséis alumnos y un maestro, e hirió a otros quince, antes de suicidarse. Sigue siendo el tiroteo masivo más mortífero en la historia británica. El debate público sobre los asesinatos se centró en las leyes de control de armas, incluidas las peticiones públicas para prohibir la propiedad privada de armas de fuego y una investigación oficial, que produjo el Informe Cullen de 1996. En respuesta a este debate, se aprobaron dos nuevas Leyes de Armas de Fuego que prohibieron la propiedad privada de la mayoría de las armas de fuego en el Reino Unido.