Cada 23 de septiembre, el Reino de Arabia Saudita se viste de gala para conmemorar su Día Nacional, una fecha que trasciende la simple observancia de un calendario para celebrar el nacimiento y la consolidación de la nación moderna. Este día no solo marca una efeméride, sino el culmen de un proceso histórico transformador: la proclamación oficial del Reino de Arabia Saudita por parte del visionario Rey Abdulaziz Ibn Saud en 1932. Lo que hoy conocemos como uno de los países más influyentes del mundo, emergió de una amalgama de regiones históricas bajo una única bandera y un liderazgo unificado.

Antes de esta trascendental unificación, la península arábiga albergaba diversas entidades y emiratos con sus propias historias y gobernantes. Las más prominentes eran el Reino de Hiyaz, que contenía las sagradas ciudades de La Meca y Medina y había estado bajo influencia otomana y hachemita; y el Sultanato de Nejd, el corazón ancestral de la Casa de Saud y cuna del movimiento wahabí. Fue el carisma, la determinación y la estrategia militar y diplomática de Abdulaziz bin Abdul Rahman Al Saud, el líder de la Casa de Saud, lo que permitió la gradual consolidación de estos territorios, junto con otros como Al-Ahsa, Qatif y Asir, en una sola entidad política soberana.

La Proclamación de 1932: Un Hito Fundacional

El acto formal que selló esta unificación, y que hoy se celebra con tanta pompa y orgullo nacional, ocurrió el 23 de septiembre de 1932. Mediante un decreto real, el Rey Abdulaziz anunció la fusión de todas las regiones bajo su control para formar el Reino de Arabia Saudita, dejando atrás la denominación dual de "Reino de Hiyaz y Nejd y sus dependencias", que había estado en vigor desde 1926. Este cambio de nombre fue más que un mero formalismo; simbolizó la cohesión, la identidad compartida y el inicio de una nueva era para un pueblo que, a lo largo de los siglos, había anhelado la unidad y la soberanía plena.

Desde entonces, el Día Nacional Saudí es una jornada de profunda reflexión y orgullo. Las ciudades se adornan con banderas nacionales, exuberantes luces verdes y retratos del Rey Fundador y los monarcas posteriores. Se realizan desfiles militares y civiles que muestran la fortaleza y la unidad del país, espectáculos aéreos acrobáticos, fuegos artificiales que iluminan el cielo nocturno y una miríada de eventos culturales que celebran la rica herencia del reino, su progreso constante y sus ambiciosas aspiraciones futuras, como las delineadas en la Visión 2030. Es un momento para que los ciudadanos saudíes, desde los más jóvenes hasta los mayores, renueven su compromiso con la nación y valoren el legado de estabilidad, desarrollo y prosperidad que ha perdurado por décadas.

Preguntas Frecuentes sobre el Día Nacional Saudí

¿Qué se celebra exactamente el Día Nacional Saudí?
Se celebra la proclamación oficial del Reino de Arabia Saudita el 23 de septiembre de 1932 por el Rey Abdulaziz Ibn Saud, marcando la unificación de diversas regiones históricas, como el Reino de Hiyaz y el Sultanato de Nejd, en una sola nación soberana y unida.
¿Quién fue el Rey Abdulaziz Ibn Saud?
Fue el fundador y primer monarca del Reino de Arabia Saudita. Lideró la unificación de la península arábiga a principios del siglo XX a través de campañas militares y diplomáticas, consolidando el poder y estableciendo las bases del estado moderno saudí.
¿Por qué es importante la fecha del 23 de septiembre?
Esta fecha es crucial porque fue cuando se emitió el decreto real que formalizó el cambio de nombre de "Reino de Hiyaz y Nejd y sus dependencias" a "Reino de Arabia Saudita", simbolizando la culminación de la unificación territorial y el nacimiento de la identidad nacional moderna.
¿Cómo se celebra el Día Nacional en Arabia Saudita?
Se celebra con un día festivo nacional, que incluye vibrantes desfiles militares y civiles, espectaculares fuegos artificiales y espectáculos aéreos, conciertos con artistas locales e internacionales, eventos culturales que promueven el patrimonio saudí y una profusión de adornos patrióticos en todo el país. Es una jornada de gran orgullo nacional y reflexión.